Fe y Esperanza

Con fe y esperanza, todo se puede en la vida, pero hay que aferrarse a ellas con garras y no dejarlas por nada escapar.

Si hoy alguien me preguntara muy suelto: ¿qué es lo que más se precisa para abrirse camino en la vida? Sin duda contestaría: Con fe y esperanza viva, todo es posible obtener. Sin ellas todo va decidido al fracaso.

En un mundo donde abunda casi por todas partes el engaño y la hipocresía, ¿será posible esperar contra todo viento y marea que lo que uno proyecta y propone tenga éxito final? Sin duda que no, dirán los más.

Pero la experiencia de otros que han aceptado el reto y también ya triunfaron, afirmarán lo contrario. Y con un porte de entusiasmo que contagia y enardece nos estarán incitando a no tener miedo y probar.

Como todos sabemos, existen en toda criatura humana, momentos felices y hermosos. El corazón y la mente disfrutan de dulce calma y todo parece entonces marchar a las mil maravillas. Nada nos cuestan las cosas y es cierto que en tales instancias todo resulta agradable y fácil de realizar.

Pero por otra parte, también existen momentos y quizás sean los más, donde no siempre es muy fácil conservar esa paz y esa calma que tanto bien nos produce. Son muchas y duras las pruebas que dificultan la ruta que apunta directamente hacia mejores destinos.

Hay momentos insoportables en que las penas del cuerpo o del alma parecen fijarse lugar y cita para poder allí desplegar todo el terrible arsenal de total desolación. Se apagan todas las luces y sólo se atina a bracear inseguro en medio de la oscuridad.

¿Qué hacer, entonces, en trances tan duros y negros? ¿A qué recursos es posible acudir en tal situación? Cuando en la vida todo se pierde y se esfuma, sólo una cosa podrá servirnos de guía y amparo: la fe que no se debe perder pero sí se debe avivar.

Si nosotros sabemos confiar en Dios y esperar sin miedo su ayuda, veremos calmarse las olas embravecidas de nuestro mar interior y de nuevo encontrar la luz para iluminar nuestras vidas y renovar nuestros sueños.

Rogelio Oro