SILICONAS ... ¿Para qué?

Acabo de ver en un noticiero de televisión nacional, la información sobre la muerte de una mujer de 33 años, luego de más de un mes de tortura mental y física, en la Ciudad de Córdoba.

Ella, "para verse más linda" y en contra de la opinión de su marido, decidió operarse de los pechos y las nalgas. Pero lo que ella no sabía era que la "profesional" médica que la operó, era "trucha", o sea que no tenía título de doctora.

Yo tengo una amiga, muy cercana en el afecto, que vive soñando en operarse de esto y aquello, a pesar de haberse hecho algunas operaciones en su vida, y haber soportado dolores, incomodidades y hasta sospechas de complicaciones en una de ellas. Un misterio que sólo saben los que estaban en la sala de operación, porque hay indicios que mi amiga pudo no haber salido con vida de allí.

Volviendo a la mujer cordobesa, un día salió de su casa, fue a hacerse la cirugía de implantación de siliconas, sin que su esposo lo supiera. Cuando volvió, le dijo: "vení, que te voy a mostrar algo que te va a gustar", a lo que él respondió, entre preocupado e irritado -"ya sé de que me hablás y no me va a gustar"-, ella le mostró y él comentó "esto te va a traer complicaciones", a lo que ella contestó "no te preocupes, no me va a pasar nada".

Abreviando, a partir de ese día empezaron los problemas, pequeñas pérdidas de siliconas, dolores, molestias, hasta que un día le reventó un pecho y fueron urgentemente a consultar a un médico. Éste le dijo, "mirá, tenés hecho un desastre tu cuerpo, hacete unos análisis y si salen bien, te opero". Pero los análisis dieron que las siliconas habían invadido su cuerpo, provocándole leucemia, complicaciones en el páncreas y otros órganos. Estaba condenada.

Después de un mes internada, falleció, dejando llenos de dolor a sus padres, su esposo que la amaba y a 5 (cinco) hijos sin madre, que ya no la tendrán nunca más, porque ella quería "estar mas linda".

Sé la respuesta de muchas mujeres a favor de las cirugías estéticas, porque mi amiga es una de ellas. "En las estadísticas, es un número ínfimo, casi irrelevante, el de mujeres que tienen problemas con las cirugías de ese tipo", como si "una en un millón" fuera la cifra preferida, donde ellas NUNCA son el "una". Pregunten a la familia de esa mujer de Córdoba, qué piensan sobre las estadísticas y las probabilidades.

PIenso en mi amiga, en su inconciencia, en su negación a una realidad probable y muy peligrosa, en afán de ... ¿de qué?, ¿de "sentirse más linda" en pos de un ego sin valor?, ¿pensará alguna vez en su hijo, y en la posibilidad de dejarlo huérfano de madre para el resto de su vida, y todo el dolor que le provocaría?. O tal vez, si no tiene tanta suerte, ¿quedará con secuelas, como tantas otras, que van desde las deformaciones físicas -efecto contrario al buscado- hasta la parálisis corporal?. Lo más probable, lamentablemente, es que seguirá jugando a la "ruleta rusa" como otras mujeres que caminan por las calles, hasta que un día la bala salga y todo termine.

No hay nada más lindo, más hermoso que el encanto de una mujer, pero el encanto que irridia su personalidad, porque lo material se degrada naturalmente y nada puede evitarlo. No hay nada en este mundo, que logre algo milagrosamente a través de pastillas, cirugías o dietas "asesinas". No hay nada en este mundo que perdure, si no se ha logrado con constancia, fuerza de voluntad y responsabilidad para uno mismo y para los que nos quieren bien. Ojalá aquellas que eligen el pseudo "camino fácil", algún día recobren la cordura. Ese día serán mucho más lindas de lo que hoy mismo ya la lo son, por su personalidad, por su carisma, por su calidez y justamente por eso las queremos tanto.

Lucio.