10 Lecciones

1 - El trabajo es para la realización de las personas, no las personas para la gloria del trabajo.

2 - No te dejes esclavizar por el trabajo. No se vale decir: trabajo mucho para darles a mis hijos lo mejor y luego decir: no tengo tiempo para hablar con ellos. Evita hacer de tu trabajo o el de tus empleados y colaboradores una rutina. “No es lo que me trae cansado este camino de ahora. No cansa una vuelta sola. Cansa el estar todo el día, hora tras hora y día tras día, un año, año tras año, una vida, dando vueltas a la Noria”.

3 - Evita trabajos rutinarios, interminables, ingratos y sin reconocimientos, muy fatigantes y mal retribuidos. Para evitarlos, la mejor solución es la educación, la lectura y el aprender de los demás y salirse inmediatamente del trabajo que no gusta.

4 - El éxito en el trabajo viene cuando me gusta lo que hago, cuando me dan libertad de hacerlo teniendo solamente como restricciones las metas compartidas y los valores que también comparto y, finalmente, cuando en lugar de recibir regaños y presiones, recibo reconocimientos por lo que hago bien y recomendaciones y apoyo en lo que necesito mejorar.

5 - Evita trabajos rutinarios, interminables, ingratos y sin reconocimientos, muy fatigantes y mal retribuidos. Para evitarlos, la mejor solución es la educación, la lectura y el aprender de los demás y salirse inmediatamente del trabajo que no gusta.

6 - Aprendí también que la confianza es la fuerza impulsora que nos ayuda a superarnos; y que el cariño y respeto son ingredientes importantes para fortalecer la confianza. Aprendí que lo que te hace importante es el tiempo que has dedicado para ser lo que quieres –Claro, tratando de sacar de ti sólo tu mejor tú–.

7 - Aprendí que es importante no manipular la educación de los demás. Implica no moldear a la persona para que sea un doble de los que lo quieren educar. Educar es ayudar a los demás para que desarrollen sus potencialidades.

8 - Aprendí que la rutina es una gran amenaza que todo lo desgasta y erosiona. Es la mejor manera para acabar con un matrimonio, una relación de trabajo. “Que no hagan callo las cosas ni en el alma ni en el cuerpo”.

9 - Ratifiqué que la comunicación es muy importante en la pareja y en la familia para entenderse, para buscar juntos el porqué sí y el porqué no de las cosas.

10 - Aprendí que cada uno de nosotros debe sentirse responsable de todo aquello y de aquellos con quienes hemos establecido lazos de cariño y amistad. Todo esto, desde luego, para tener razones para vivir.